
Por todos son conocidos los beneficios de practicar una actividad física sencilla, moderada e inteligente a lo largo de toda la madurez. En relación a la menopausia, numerosos estudios demuestran la necesidad de incidir directa y específicamente en los músculos y articulaciones que previsiblemente sufrirán más deterioro en la etapa de la menopausia de manera precoz.
Este trabajo muscular y articular, unido a la adquisición de nuevos hábitos favorecerá llegar y vivir la menopausia saludablemente.